Niños superdotados son aquellos que poseen una inteligencia superior a la media, una elevada creatividad e imaginación y una curiosidad insaciable que hemos de saber aprovechar para el aprendizaje. Estas cualidades los hacen en seres muy especiales, con necesidades y exigencias diferentes a las de los demás, y que insuficientemente desarrolladas o indebidamente canalizadas pueden volverse en su contra.
El sistema educativo no está pensado para este tipo de alumnos y no es extraño que un niño superdotado acabe aburrido y desmotivado y con un expediente académico muy por debajo del esperado.
Por eso es conveniente contar con la orientación y el asesoramiento de un profesional especializado en el tema.
¿Cómo podemos saber si nuestro hijo está en esta categoría?
1. Duerme poco.
2. Aprende a leer en un corto espacio de tiempo.
3. Dice su primera palabra con seis meses.
4. Dice su primera frase con doce meses.
5. Mantiene una conversación entre 18 y 24 meses. Vocabulario impropio para su edad.
6. Aprende el abecedario y cuenta hasta 10 a los dos años y medio.
7. Resuelve mentalmente problemas de suma y resta hasta 10 con tres años.
8. Pregunta por palabras que no conoce desde los tres años.
9. Realiza preguntas exploratorias a edades tempranas.
10. Alta capacidad creativa.
11. Posee una alta sensibilidad hacia el mundo que le rodea.
12. Preocupación por temas de moralidad y justicia.
13. Enérgico y confiado en sus posibilidades.
14. Muy observador y abierto a situaciones inusuales.
15. Muy crítico consigo mismo y con los demás.
16. Gran capacidad de atención y concentración.
17. Le gusta relacionarse con niños de mayor edad.
18. Se aburre en clase porque sus capacidades superan los programas de estudio convencionales.
19. Son, aparentemente, muy distraídos.
20. Su pensamiento es productivo más que reproductivo. Se basan en la construcción de las cosas.
21. Tienen muy poca motivación hacia el profesor.
22. Llegan a sentirse incomprendidos, raros.
23. Son independientes e introvertidos.
Son ellos los que deberán entrar en contacto con el educador del niño, la escuela, y pedir una orientación. Seguramente, después de una evaluación del caso, los docentes pasarán el niño a la observación de un orientador, y si es el caso, a un especialista. Si realmente se confirma que el niño es superdotado, recibirán toda la orientación posible.
Si su tu hijo tiene un cociente intelectual superior debería ser detectado lo antes posible: Los especialistas recomiendan prestar atención a los patrones de niños superdotados para captar esta capacidad cuando tienen entre 3 y 8 años y actuar en consecuencia. Estos niños suelen tener problemas sociales cuando no reciben un trato adecuado.
El psicólogo Kenneth Shore, experto en educación para superdotados afirma que: "No es de sorprender que los superdotados se sientan incomprendidos por los maestros. Si la educación que reciben no se ajusta a sus necesidades, se vuelven inactivos, distraídos y tienen mala conducta ".
Los maestros a veces nos equivocamos y podemos llegar a creer que estos chicos tienen problemas de aprendizaje. Un ejemplo de esta situación fue Albert Einstein: cuando el premio Nobel de Física tenía 12 años, sus maestros determinaron que era torpe para aprender. De hecho, Einstein tenía los peores recuerdos de la escuela.
Los aconsejable es que estos niños estudien más horas a la semana y que acudan con un especialista que le ayude a canalizar sus capacidades. En Ozone te ofrecemos programas de aprendizaje especializado para niños superdotados. Ven y consúltanos.
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